HOLANDA.- El príncipe holandés Friso, hermano del rey Guillermo Alejandro, murió hoy a la edad de 44 años tras haber estado un año y medio en coma, informó la Casa Real holandesa.
El príncipe había entrado en un coma profundo tras sufrir un accidente en la estación de esquí de Lech, en Austria, en febrero de 2012, donde fue sepultado por una avalancha de nieve. Friso murió a causa de complicaciones derivadas del daño cerebral que le causó el accidente.
El hermano del rey Guillermo Alejandro había sido trasladado a principios de julio de una clínica de Londres a La Haya, donde era atendido en el palacio de su madre, la ahora princesa Beatriz, y donde murió esta mañana.
La familia real agradeció en su declaración a todos los que lo atendieron "por su cuidado extraordinario y devoto". Friso murió un día después de que su esposa Mabel cumpliera 45 cumpleaños. La princesa lo pasó junto a su esposo y sus dos hijas, Luana, de ocho años, y Zaria, de siete.
El rey Guillermo Alejandro, de 46 años, y su esposa, la argentina Máxima, interrumpieron sus vacaciones en Grecia para dirigirse a Holanda, lo que se interpretó como una señal de que no se trató de una muerte asistida. También el tercer hijo de Beatriz, el príncipe Constantino, de 43 años, es esperado en La Haya.
La noticia de la muerte de Friso conmocionó a Holanda. Las radios y los canales de televisión interrumpieron sus programaciones. Los políticos expresaron su pésame a las familias. El primer ministro holandés, Mark Rutte, dijo que la muerte del príncipe era "increíblemente triste". El ministro del Exterior Frans Timmermans habló de un "día negro". "Estamos llorando a un hombre especial", afirmó. Miles de ciudadanos expresaron sus condolencias en mensajes en Internet.
Incluso Ludwig Muxel, el alcalde de la localidad austriaca de Lech, donde Friso sufrió el accidente, reaccionó conmocionado: "Siendo alguien que como muchos ciudadanos de Lech conocía al príncipe desde que era niño, me siento personalmente muy afectado y profundamente conmovido".
El rey belga y su esposa Matilde expresaron sus condolencias a la familia real holandesa. Felipe habló por teléfono con Beatriz y con Guillermo Alejandro. Matilde, por su parte, se contactó con Máxima, informó un portavoz del palacio real.
Frente al palacio en La Haya se reunieron decenas de camarógrafos y periodistas holandeses y extranjeros. Algunos holandeses dejaron flores delante del palacio. "Esto es terrible para la familia", dijo una mujer. "Aunque quizá sea mejor así".
Las banderas del palacio en el que murió Friso ondearon a media asta. Todos los tradicionales molinos de viento del país fueron detenidos y el aspa más alta no se encuentra perpendicular. El príncipe Friso era patrono de la Unión de Molinos Holandeses.
Por ahora, se desconoce donde será sepultado. El sepulcro de la familia real Nieuwe Kerk en Delft está actualmente siendo renovado.
En noviembre del año pasado, pareció mejorar el estado de Friso: el príncipe presentaba señales mínimas de conciencia. Sin embargo, en julio de este año quedó claro que no había más esperanzas.
La situación del segundo hijo de la reina Beatriz fue mencionada como uno de los motivos por los que ésta decidió abdicar en abril de este año, después de 33 años en el trono.
Friso estaba con un amigo fuera de la pista cuando se produjo una avalancha y sepultó a ambos esquiadores. Mientras que el acompañante se pudo salvar gracias a estar mejor equipado, Friso quedó sepultado. Durante 20 minutos estuvo a 40 centímetros bajo la nieve, antes de poder ser rescatado y reanimado.
El príncipe sufrió graves daños cerebrales a causa de la larga falta de oxígeno y una parada cardíaca y se encontraba desde entonces en coma.
Hasta su traslado a los Países Bajos en julio, el príncipe era tratado en una clínica especializada de Londres, ciudad donde residía antes del accidente. Casi todos los fines de semana su madre iba a verlo. Y también sus hermanos, Guillermo Alejandro y Constantino.
Friso era considerado un hombre muy inteligente, deportista y más bien tímido. Había perdido su derecho de sucesión al trono al renunciar a pedir la confirmación oficial del Parlamento para su boda con Mabel, una personalidad controvertida después de que se supiera que en sus tiempos de estudiante había mantenido una relación sentimental con Klaas Bruinsma, uno de los mayores narcotraficantes de Holanda.
Hasta el trágico accidente, Friso era jefe de Finanzas de la empresa atómica URENCO en Londres.